Lima, 13 de agosto de 2014
El editorial del sábado pasado "La misión de los buitre" concluye que esta particular clase de "holdouts" cumple una función benéfica para el sistema financiero internacional.
En el caso argentino, la sentencia del juez Griesa determinó que el Estado debe pagar al Fondo MNL Capital, una suma cercana a los 1.500 millones de dólares, lo que representa un beneficio del 1.600 % sobre una gran parte de los fondos adquiridos por ese fondo. Este retorno es imposible de alcanzar por medio de cualquier actividad capitalista seria.
En su fallo, el juez hace una controvertida interpretación del principio de pari passu, al privilegiar a una absoluta minoría (1%) de los bonistas, por sobre el 93 % que accedió a la reestructuración. A la vez mantiene bloqueados los 539 millones de dólares girados por Argentina para cumplir su compromiso.
Repasemos algunos hechos:
.-Cuando el Dr. Néstor Kirchner asumió la presidencia de mi país, (mayo de 2003), el default ya había sido declarado (diciembre de 2001) por el entonces Presidente Adolfo Rodríguez Saá. La deuda externa ascendía en ese entonces al 160% del PBI.
.-En los gobiernos de Néstor Kirchner y Cristina Fernández se normalizó y pagó puntualmente la deuda privada con el 93% de los acreedores, que aceptaron la oferta del canje. Dicha propuesta era la mejor que el gobierno argentino podía ofrecer para que fuese sustentable, y la economía recobrara el crecimiento con superávit fiscal y externo. A la vez que se garantizaron niveles de empleo y de vida digna para la población.
.-Los términos del canje resultaron sustancialmente mejores a los de los anuncios originales. Una gran parte de los bonistas que aceptaron el canje suscribieron bonos con un cupón atado al crecimiento del PBL Como la economía argentina creció a una tasa promedio del 7% anual, lo percibido por los acreedores fue apreciablemente mayor a las expectativas iniciales.
-Los títulos reestructurados contienen una cláusula, R UFO, por la cual los bonistas que aceptaron la reestructuración, podrían reclamar el mismo trato que el fondo buitre MNL Capital. De ser así, la obligación derivada del fallo del juez Griesa representaría al menos 150 mil millones de dólares; monto que ninguna economía de la región está en condiciones de afrontar.
.-El gobierno argentino actuó constructivamente a lo largo del proceso judicial. Solicitó a los tribunales que repusieran el "stay" o medida cautelar, dado que el 31 de diciembre de este año vence la cláusula RUFO. De esta forma, la negociación con el fondo buitre podría hacerse con mayor equidad y sin el peligro de poner en riesgo la sostenibilidad de toda la reestructuración acordada .
. -Al mismo tiempo se ofreció al demandante -pese a los plazos vencidos para su acogimiento-entregar titulos equivalentes a los aceptados por el 93% de los bonistas, cuyo retorno representa alrededor del 300% de lo "invertido" por MNL.
.-La posición del gobierno es responsable. Podría pagar la suma demandada al alto riesgo de generar un gran prejuicio a la economía argentina por lo citado anteriormente. Las consecuencias deberían ser afrontadas por la administración que lo suceda. Todo lo contrario dela demagogia o populismo con el que se suele etiquetarlo .
. -Este episodio abre una necesaria discusión sobre el sistema global para la restructuración de deudas soberanas y la conformación de mayorías para la aceptación de los canjes ofrecidos por los gobiernos.
La mayoría de los gobiernos, y economistas como Robert Solow, Joseph Stiglitz, José Antonio Ocampo, Dani Rodrik, se han manifestado en respaldo a la posición argentina, señalando las derivaciones negativas del fallo .
. -Así también, existen algunas opiniones -como las expresadas en el editorial de apoyo al accionar de los fondos buitres. Estas opiniones se basan en que esta clase de agentes generaría mayores incentivos para que los países honren sus deudas, aunque en este caso su accionar está impidiendo que la mayoría de los acreedores de la deuda reestructurada perciban lo que les corresponde.